viernes, 2 de septiembre de 2011



El tren que busco va lleno 
de ángeles de alas rotas,
de suspiros rotos,
con tangos alegres,
de canciones bonitas,
y ojos cerrados.


De paños de lágrimas secas,...
copas de vino no recordarás,
y muros del silencio.


El tren de Lunas castizas,
de noches traviesas,
y soles amargos.


Ven, párate en esta estación,
déjame subir al tercer vagón,
para hacer del Olvido,
tu universo de poemas,
y mi mundo de cristal. 


Y es que mi amor,...
hoy volví a ver aquel tren,...
el que me enseño tu rostro por primera vez. 

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